Playlist (Cap. 1)
3 participantes
Página 1 de 1.
Playlist (Cap. 1)
Track #01: “Welcome to my life”
El sol apenas estaba saliendo aquella mañana de Agosto cuando Saúl Salziso ya estaba despierto y listo para irse. Se miró por última vez en el espejo, llevaba puestos una camisa azul marino de manga corta, unos jeans negros y un par de tenis muy cómodos, acababa de cortarse el cabello y cuando se puso su loción se sintió preparado para su primer día de clases en la Facultad de Artes Escénicas. Estaba a punto de salir de su habitación cuando se dio cuenta que olvidaba su mochila, dio media vuelta y se acercó a un escritorio con un cajón agujerado, tomó la mochila que estaba sobre éste y revisó cuidadosamente una rosa que se hallaba dentro de un florero sin agua, al verla sin rastros de marchitarse dio un suspiro y salió del cuarto.
Los rayos del sol entraban por las ventanas y los pájaros cantaban sin cesar cuando Sebastián Sena apagaba su despertador por sexta vez aquella mañana. Un llamado de atención desde la cocina lo hizo saltar en la cama de un susto; miró el despertador que ya marcaba las 6:30 de la mañana y se levantó, corrió hacia el baño y se duchó lo más rápido que pudo. Al salir se puso unos jeans azules, una camiseta roja y un chaleco blanco; se miró en el espejo y torció la boca, sacó una boina anaranjada de su armario, la colocó encima de su liso cabello castaño claro y sonrió al mirarse de nuevo. Después de colocarse sus lentes de contacto y ponerse crema en su piel blanca, tomó su mochila, sonrió de nuevo al ver una foto de él con una chica y otro chico muy apuestos y de su edad, y salió del cuarto.
Saúl estaba esperando el autobús mientras Sebastián caminaba hacia una limusina anaranjada que esperaba en el jardín de su casa. Su chofer, un hombre alto, joven, de cabello oscuro, bigote y que lucía un traje de gala lo esperaba con la puerta trasera de la limusina abierta.
Sebastián: Hola, George
Jorge: Me llamo Jorge, joven Sebastián.
Sebastián: Ya lo sé, Georgie^^… ¡Óyeme! ¿Dónde está tu uniforme?
Jorge: Lo traigo puesto, joven.
Sebastián: No seas mentiroso, te falta algo.
Jorge: Pero joven…
Sebastián abrió su mochila y sacó otra boina anaranjada que puso sobre la cabeza de su chofer.
Sebastián: Listo^^ así está mucho mejor, George, recuerda que: “el anaranjado…
Jorge: …nunca pasa de moda” T_T
Sebastián: Exactly!
Jorge: Ok, le juro que no se me vuelve a olvidar pero súbase ya o se nos va a hacer tarde en su primer día.
Sebastián: ¡Ay! Sí, es cierto, la facu, ¡vámonos, Georgie!
Sebastián se subió a la limusina mientras su chofer ponía los ojos en blanco y ambos se marchaban a la Facultad de Artes Escénicas.
Mientras tanto, Saúl también iba en camino a la facultad tratando de mantenerse de pie en un autobús lleno hasta el tope de gente.
Saúl: Oiga, señor chofer…
Chofer: ¿Qué?¬¬
Saúl: ¿Podría ir un poquito más rápido? Es que ya se me está haciendo tarde y es mi primer día, además me levanté muy temprano hoy y pues parece que fue en vano…
Chofer: Pos es que no es mi culpa que no tengas carro, mijo. A la otra te levantas más tempranito y ya no me hables o sino ni llegas.
Saúl: Ok, muchas gracias¬¬
Chofer: Denada^^
Inmediatamente después de que Saúl bajó del autobús, se apresuró y corrió a su facultad sin detenerse. El estacionamiento le parecía eterno pero se llenó de aliento cuando vio que cada vez estaba más cerca, entonces escuchó el claxon de un coche y volteó a su izquierda viendo como una limusina anaranjada se detuvo justo antes de golpearlo. Las piernas de Saúl se doblaron y cayó al suelo de espaldas mirando aun asustado la limusina. Un hombre con una ridícula boina del mismo color que la limusina se bajó de ella y se acercó a Saúl corriendo.
Jorge: ¿Estás bien, amigo?
Saúl: Sí, sí… sólo me dio un susto.
Jorge: Perdón, es que veníamos con prisa y…
Saúl vio a un joven muy guapo bajar de la limusina, también llevaba una boina anaranjada, se acercó rápido a ellos mientras Jorge ayudaba a Saúl a levantarse.
Sebastián: ¡¿Qué pretendes, individuo?! Mira que pasarte corriendo de esa manera frente a los coches, ¡casi dañas mi limusina! Y lo peor… ¡casi haces que Georgie mate a alguien en mi primer día!
Saúl: ._.
Jorge: Joven Sebas…
Sebastián: No, no, nada, George. Esperemos a que este individuo se disculpe y rápido que ya es tarde.
Saúl: ¿Disculpa?
Sebastián: Bien hecho^^. Vámonos, Geor…
Saúl: No, no me estoy disculpando. En primer lugar no me llamo “individuo” y no me gusta que me llamen de otra forma que no sea mi nombre y en segundo, no sé si sepas pero los carros no pueden pasar por aquí, para eso está el estacionamiento.
Sebastián: Pues fíjate que sí lo sé pero como ya era tarde le dije a Georgie que me dejara en la entrada…
Saúl: Sí, es cierto, ya es bien tarde. Tengo que irme o no llego >.<
Sebastián: ¡Ash! La facu… Georgie, ve por mi mochila y sígueme.
Saúl y Sebastián entraron corriendo a la facultad y Jorge fue detrás de ellos con la mochila de Sebastián en las manos.
Ambos corrían por los pasillos y subían escaleras a toda velocidad. Saúl pensaba que había sido buena idea ponerse esos cómodos tenis mientras Sebastián se preguntaba si la ropa s le arrugaría mucho. Por fin habían llegado al salón, los dos acercaron sus manos al pomo de la puerta y comenzaron a empujarse el uno al otro para abrirla primero, entonces ésta se abrió y un hombre alto, delgado, calvo, con bigote y que vestía una camisa a cuadros con un pantalón beige y zapatos negros los miró con una mueca de extrañeza.
Tipo: ¿Se les ofrece algo?
Los dos se pararon derechos y lo miraron sonrojados.
Saúl: ¿Usted es el profe? Es que tengo clase aquí…
Tipo: Así es, soy Fernando Garza, pásenle que ya tienen 10 minutos de retraso.
Sebastián: Perdón, profe, es que se me hizo tarde por culpa del individuo este que se me atravesó…
Saúl: ¡No es cierto! Ya venías tarde…
Profe: Pásenle ya¬¬
Ambos entraron y el profesor se acercó al escritorio, tomó una lista y una pluma.
Profe: ¿Cómo se llaman?
Los dos: Sebastián Salziso…
Saúl y Sebastián se miraron al darse cuenta que habían hablado al mismo tiempo provocando que sus nombres se mezclaran.
Profe: Uno a la vez, por favor.
Los 2: Saúl Sena…
Volvieron a mirarse pero esta vez con más rabia que antes, el profesor dio un largo suspiro.
Profe: Sebastián Sena y Saúl Salziso ¿verdad?
Los dos: Sí
Profe: Listo. Tomen asiento.
Ambos buscaron dónde sentarse, los pupitres eran dobles y sólo quedaban uno al frente. Sebastián se adelantó y se sentó en él. Saúl hizo un esfuerzo por buscar otro pero no logró encontrarlo, así que se sentó con Sebastián.
Sebastián: ¿Qué pretendes, individuo?
Saúl: Sentarme¬¬
Sebastián: Sí, sí. ¿Pero por qué aquí?
Saúl: No hay más lugares.
Sebastián: Ash, pero osea…
Profe: Silencio, por favor¬¬
Saúl y Sebastián se cruzaron de brazos y voltearon hacia lados contrarios sin mirarse.
Profe: Bueno, como les decía…
La puerta del salón volvió a abrirse y por ella se asomó un hombre con una mochila en la mano, se vía muy agitado.
Jorge: Joven Sebastián… su mochila.
Sebastián: cierto o.o
Sebastián caminó hasta la puerta y tomó su mochila, el profesor, algo enojado, miró su trayecto.
Sebastián: Gracias, Georgie. Nos vemos a la salida^^
Cuando Sebastián volvió a su banco, el profesor dio otro suspiro y continuó hablando.
Profe: Bueno, por enésima vez¬¬ …
Sebastián: ^^
Profe: Les decía que yo seré su profesor de Apreciación a las Artes pero además de eso, soy el director del taller de teatro de la facultad.
Saúl y Sebastián se inclinaron en su banco con los ojos brillantes y mirando fijamente al profesor.
Profe: Mañana van a publicarse unas listas para todos los interesados en inscribirse en el taller, luego de hacerlo tendrán que presentarse a una audición para ver si están calificados para el taller y si son lo suficientemente buenos, podrán tener un papel en la primera obra del semestre que será “El retrato de Dorian Gray”
Sebastián y Saúl: ¡Amo ese libro!
Los dos volvieron a mirarse, esta vez parecía que estaban desafiándose con la mirada.
Sebastián: Espero que no estés pensando lo que creo que estás pensando.
Saúl: Bueno, alguno de los dos tiene que pensar.
Sebastián: Sí, bueno… ehm… ¿qué quisiste decir? O.o
Saúl: No vas a ser Dorian Gray >.<
Sebastián: Ya lo veremos, individuo.
Saúl: ¡Deja de decirme así! D:
Profe: Bueno, muchachos. Sólo me queda darles la bienvenida a la facultad, bienvenidos a mi mundo y bienvenidos a mi vida que espero pronto también sea la de ustedes… ah, y algo más, las actividades del curso se realizarán en parejas y pues para no perder tiempo y conozcan gente nueva, su compañero será con quien están sentados ahora mismo.
Saúl y Sebastián: ¡¿QUÉ?!
Ambos comenzaron a hablar al mismo tiempo sin que alguien entendiera algo de lo que decían.
Profe: ¡Cállense!
Sebastián: …Individuo¬¬… ups^^’
Profe: Si hubieran llegado temprano tendrían otros compañeros pero todo ocurrió de esta forma, así que debe haber una razón para que ustedes estén aquí, juntos. El destino así debe quererlo y me aseguraré de que nadie se haya cambiado, tengo memoria fotográfica. Es todo por hoy, pueden irse.
Todos comenzaron a salir del salón, Saúl subió su mochila al banco para guardar una libreta y entonces Sebastián la tomó y miró aterrado la parte frontal de esta que tenía grabadas en color azul las iniciales “S. S.”
Sebastián: ¡¿Por qué tu mochila dice eso?!
Saúl: Son mis iniciales, Saúl Salziso, “S. S.”
Sebastián alzó su mochila, en la parte de enfrente, con letras anaranjadas ponía: "S. S."
Sebastián: Sebastián Sena, "S. S."¬¬
Saúl: ¡me lleva la…!
Chica: ¡Konnichiwa!^^
Una chica pelirroja estaba detrás de ellos, los miraba con una gran sonrisa en su rostro, era delgada, de la misma estatura que ellos, su roja cabellera era lisa y larga y sus ojos eran cafés.
Los dos: Hola o.o
Chica: Soy Silva Luisana, tú eres Sena-kun y tú, Salziso-kun. ¿Verdad?
Saúl: Sí…
Sebastián: Yo no soy ningún Senakun, me llamo Sebastián.
Luisana: ¿Entonces puedo llamarte Sebastián-kun?^^
Sebastián: Ehmm… ¿eso te hace feliz?
Luisana: Sí, muchísimo.
Sebastián: Bien, whatever…
Saúl: A mí también puedes llamarme por mi nombre de pila.
Luisana: Muchas gracias a los dos, Sebastián-kun y Saúl-kun son tan amables…
Sebastián: Que soy Sebastián¬¬
Saúl: Son sufijos japoneses, tonto¬¬’
Sebastián: Par de frikis ._.
Luisana: Saúl-kun y Sebastián-kun harían linda pareja *o*
Los dos: ¡¿Qué?! O_O
Luisana: Son graciosos juntos y eso es adorable x3
Saúl: ¡Claro que no!
Sebastián: ¿Yo con este individuo? JA! Ya me tengo que ir…
Saúl: ¡Saúl! ¡Me llamo Saúl!
Sebastián siguió caminando sin prestarle atención.
Luisana: Son como los protagonistas de Lawful Drug*o*
Saúl: También me encanta ese manga *o* ¡pero no es así!¬¬
Pasaron otras 2 clases y en ninguna de ellas Sebastián y Saúl volvieron a encontrarse. Luego, Sebastián tuvo una hora libre que aprovechó para ir a la cafetería a almorzar, ahí se encontró con una joven morena, delgada, de cabello rizado que llevaba recogido, tenía muy lindas facciones y era digna de atraer la mirada de cualquiera. Era la misma que estaba en la fotografía del cuarto de Sebastián. Éste la saludó de beso y se sentó con ella.
Sebastián: Creí que nunca te encontraría…
Cinthia: Tuvimos la primera clase juntos pero como llegaste tarde no te pude guardar el lugar y además Ismael también está en ella. Oye y ¿qué onda con el chavo ese que llego contigo?
Sebastián: ¿el Individuo? Pues lo conocí en la entrada cuando se le atravesó a Georgie¬¬ pero… ¿dices que Ismael está en esa misma clase? *o*
Cinthia: Sip, eso es lo genial de que los 3 entráramos a la misma facultad. Es maravilloso.
Sebastián: Oye, me acabo de acordar que… aun no me has dicho quién es el chavo que te gusta.
Cinthia se sonrojó y bajó la mirada.
Cinthia: Ehm… ya lo sabrás. Tal vez hoy o a más tardar mañana, y yo estoy segura que a ti también te gusta alguien y no me lo has dicho.
Sebastián: Bueno, pero es que es un poco más complicado, es que lo que pasa… Cinthia, yo soy…
Cinthia: ¡Ismael!
Un chico alto, delgado, de cabello oscuro y piel aperlada se fue acercando a la mesa. Usaba lentes y su cabello era liso, él era el otro chico de la foto. Sebastián se había quedado embobado mirándolo mientras él se acercaba y saludaba a Cinthia. Le parecía mágica la forma en que su cabello se movía cuando se agachaba, le fascinaba la forma en que se acomodaba sus lentes, le daba ternura su agradable y cálida sonrisa…
Ismael: ¡Qué onda, Seba!^^
Sebastián: Ho-hola, Ismael.
Ismael: Los extrañe tanto en las vacaciones, un día de estos tenemos que salir…
Cinthia: Pero si nos la pasamos saliendo en las vacaciones…
Ismael: ¿Y? Nunca es demasiado si se trata de divertirse con las personas que más quieres.
Ismael miró a Sebastián y le sonrió, éste sintió que su cara y sus oídos se ponían muy calientes.
Ismael: Seba, ¿te sientes bien? o.o estás muy rojo…
Ismael tocó la cara de Sebastián y lo miró fijamente, a Sebastián se le cortaba la respiración.
Ismael: ¡Y tu cara está ardiendo! D:
Sebastián se levantó y caminó hacia la entrada de la cafetería. Cinthia e Ismael lo miraron sorprendidos.
Ismael: ¡Seba, ¿a dónde vas?!
Sebastián: Al baño…
Ismael: Pero el baño está…
Sebastián siguió caminando sin detenerse y salió sin saber a donde se dirigía.
Ismael: …aquí al fondo :/
Sebastián se detuvo fuera de la biblioteca, tocó su cara dónde Sebastián había puesto su mano, su toque había sido muy dulce y suave, podría decirse que hasta con cariño… abrió su mochila y de ella sacó un sobre rosa que contenía una carta dirigida a Ismael.
Sebastián: Ya no puedo más, tengo que decírtelo…
Samuel: ¡Sebastián!^^
Un chico alto, de cuerpo atlético, cabello oscuro, piel aperlada y muy guapo abrazó por la espalda a Sebastián, provocando que éste se asustara y se alejara de él inmediatamente.
Sebastián: ¡¿Qué sientes abrazándome así, Ridículo?! >.<
Samuel: Pues nada o.o sólo que me dio mucho gusto verte y pues quería… tenía ganas de… no quiero que pienses que mis intenciones eran otras o que soy un depravado o… :S
Samuel comenzó a sudar y tartamudear mucho, tanto que Sebastián no entendía nada de lo que decía… ni quería hacerlo.
Samuel: …po-porque, no qui-quise to-to-tocarte donde no-no de-debía, si es que-que-que lo llegué a-a ha-hacer aunque creo que-que no pe-pe-pero…
Sebastián: ¡Stop!
Samuel se quedó callado al instante.
Sebastián: Ya te he dicho que el hecho de que tu primo y yo seamos befos no quiere decir que tú y yo tengamos que fingir que nos llevamos bien…
Samuel: ¿Fingir? pero si yo no…
Sebastián: Nada¬¬ y ya tengo que ir a hacer algo…
Samuel: ¡Espérate, es que te…!
Sebastián volvió a la cafetería a toda velocidad pero no encontró a quien buscaba, salió de ahí y corrió por los pasillos cercanos hasta que lo vio. Ismael estaba parado en medio de la plaza de la facultad, la cual tenía 4 jardineras cuadradas, acomodadas cada una en una esquina, en el centro estaba el emblema de la facultad, que consistía en 2 máscaras rodeadas por un círculo que tenía a su alrededor el nombre de la facultad, una de ellas sonreía y la otra parecía triste. Frente a Ismael estaba Cinthia diciendo algo que a Sebastián no le importó hasta que vio como él sonreía y asentía con su cabeza, tomaba la barbilla de Cinthia acercándola lentamente a sus labios y le daba un beso con el que comenzaba su relación.
La gente caminaba alrededor de ellos sin detenerse, nadie parecía prestarles atención mas que Sebastián, quien metió el sobre rosado a su mochila sin siquiera mirarlo. Sentía como si alguna enorme fuerza proveniente de algún punto en el cielo le hubiese atravesado el cuerpo, quizá era parecido a lo que se sentía al ser víctima de la caía de un rayo. Mientras que su alma se había convertido en miles de trozos de un espejo roto y ahora sus pies eran los únicos soportando ese peso que antes no se sentía. Se dio la vuelta y vio a Samuel acercándose.
Samuel: Te alcancé^^ pff, no por nada dicen que soy un excelente deportista… mira, ¿recuerdas cuando los vimos? es que noté que tus audífonos…
Samuel seguía hablando y los oídos de Sebastián se estaban cansando…
Samuel: Y te los compré^^
Samuel le dio unos audífonos anaranjados con detalles blancos a Sebastián, éste los miró sin darse cuenta de lo que hacía, entonces los apretó fuertemente con su mano y miró a Samuel con una gran desesperación.
Samuel: Ahora quisiera decirte algo muy importante…
Sebastián: ¡Aléjate de mí, IMBÉCIL!
Sebastián le lanzó el regalo en la cara y se fue corriendo. Los audífonos cayeron al suelo y Samuel se apresuró a levantarlos.
Samuel: ...Te amo u.u’
El sol apenas estaba saliendo aquella mañana de Agosto cuando Saúl Salziso ya estaba despierto y listo para irse. Se miró por última vez en el espejo, llevaba puestos una camisa azul marino de manga corta, unos jeans negros y un par de tenis muy cómodos, acababa de cortarse el cabello y cuando se puso su loción se sintió preparado para su primer día de clases en la Facultad de Artes Escénicas. Estaba a punto de salir de su habitación cuando se dio cuenta que olvidaba su mochila, dio media vuelta y se acercó a un escritorio con un cajón agujerado, tomó la mochila que estaba sobre éste y revisó cuidadosamente una rosa que se hallaba dentro de un florero sin agua, al verla sin rastros de marchitarse dio un suspiro y salió del cuarto.
Los rayos del sol entraban por las ventanas y los pájaros cantaban sin cesar cuando Sebastián Sena apagaba su despertador por sexta vez aquella mañana. Un llamado de atención desde la cocina lo hizo saltar en la cama de un susto; miró el despertador que ya marcaba las 6:30 de la mañana y se levantó, corrió hacia el baño y se duchó lo más rápido que pudo. Al salir se puso unos jeans azules, una camiseta roja y un chaleco blanco; se miró en el espejo y torció la boca, sacó una boina anaranjada de su armario, la colocó encima de su liso cabello castaño claro y sonrió al mirarse de nuevo. Después de colocarse sus lentes de contacto y ponerse crema en su piel blanca, tomó su mochila, sonrió de nuevo al ver una foto de él con una chica y otro chico muy apuestos y de su edad, y salió del cuarto.
Saúl estaba esperando el autobús mientras Sebastián caminaba hacia una limusina anaranjada que esperaba en el jardín de su casa. Su chofer, un hombre alto, joven, de cabello oscuro, bigote y que lucía un traje de gala lo esperaba con la puerta trasera de la limusina abierta.
Sebastián: Hola, George
Jorge: Me llamo Jorge, joven Sebastián.
Sebastián: Ya lo sé, Georgie^^… ¡Óyeme! ¿Dónde está tu uniforme?
Jorge: Lo traigo puesto, joven.
Sebastián: No seas mentiroso, te falta algo.
Jorge: Pero joven…
Sebastián abrió su mochila y sacó otra boina anaranjada que puso sobre la cabeza de su chofer.
Sebastián: Listo^^ así está mucho mejor, George, recuerda que: “el anaranjado…
Jorge: …nunca pasa de moda” T_T
Sebastián: Exactly!
Jorge: Ok, le juro que no se me vuelve a olvidar pero súbase ya o se nos va a hacer tarde en su primer día.
Sebastián: ¡Ay! Sí, es cierto, la facu, ¡vámonos, Georgie!
Sebastián se subió a la limusina mientras su chofer ponía los ojos en blanco y ambos se marchaban a la Facultad de Artes Escénicas.
Mientras tanto, Saúl también iba en camino a la facultad tratando de mantenerse de pie en un autobús lleno hasta el tope de gente.
Saúl: Oiga, señor chofer…
Chofer: ¿Qué?¬¬
Saúl: ¿Podría ir un poquito más rápido? Es que ya se me está haciendo tarde y es mi primer día, además me levanté muy temprano hoy y pues parece que fue en vano…
Chofer: Pos es que no es mi culpa que no tengas carro, mijo. A la otra te levantas más tempranito y ya no me hables o sino ni llegas.
Saúl: Ok, muchas gracias¬¬
Chofer: Denada^^
Inmediatamente después de que Saúl bajó del autobús, se apresuró y corrió a su facultad sin detenerse. El estacionamiento le parecía eterno pero se llenó de aliento cuando vio que cada vez estaba más cerca, entonces escuchó el claxon de un coche y volteó a su izquierda viendo como una limusina anaranjada se detuvo justo antes de golpearlo. Las piernas de Saúl se doblaron y cayó al suelo de espaldas mirando aun asustado la limusina. Un hombre con una ridícula boina del mismo color que la limusina se bajó de ella y se acercó a Saúl corriendo.
Jorge: ¿Estás bien, amigo?
Saúl: Sí, sí… sólo me dio un susto.
Jorge: Perdón, es que veníamos con prisa y…
Saúl vio a un joven muy guapo bajar de la limusina, también llevaba una boina anaranjada, se acercó rápido a ellos mientras Jorge ayudaba a Saúl a levantarse.
Sebastián: ¡¿Qué pretendes, individuo?! Mira que pasarte corriendo de esa manera frente a los coches, ¡casi dañas mi limusina! Y lo peor… ¡casi haces que Georgie mate a alguien en mi primer día!
Saúl: ._.
Jorge: Joven Sebas…
Sebastián: No, no, nada, George. Esperemos a que este individuo se disculpe y rápido que ya es tarde.
Saúl: ¿Disculpa?
Sebastián: Bien hecho^^. Vámonos, Geor…
Saúl: No, no me estoy disculpando. En primer lugar no me llamo “individuo” y no me gusta que me llamen de otra forma que no sea mi nombre y en segundo, no sé si sepas pero los carros no pueden pasar por aquí, para eso está el estacionamiento.
Sebastián: Pues fíjate que sí lo sé pero como ya era tarde le dije a Georgie que me dejara en la entrada…
Saúl: Sí, es cierto, ya es bien tarde. Tengo que irme o no llego >.<
Sebastián: ¡Ash! La facu… Georgie, ve por mi mochila y sígueme.
Saúl y Sebastián entraron corriendo a la facultad y Jorge fue detrás de ellos con la mochila de Sebastián en las manos.
Ambos corrían por los pasillos y subían escaleras a toda velocidad. Saúl pensaba que había sido buena idea ponerse esos cómodos tenis mientras Sebastián se preguntaba si la ropa s le arrugaría mucho. Por fin habían llegado al salón, los dos acercaron sus manos al pomo de la puerta y comenzaron a empujarse el uno al otro para abrirla primero, entonces ésta se abrió y un hombre alto, delgado, calvo, con bigote y que vestía una camisa a cuadros con un pantalón beige y zapatos negros los miró con una mueca de extrañeza.
Tipo: ¿Se les ofrece algo?
Los dos se pararon derechos y lo miraron sonrojados.
Saúl: ¿Usted es el profe? Es que tengo clase aquí…
Tipo: Así es, soy Fernando Garza, pásenle que ya tienen 10 minutos de retraso.
Sebastián: Perdón, profe, es que se me hizo tarde por culpa del individuo este que se me atravesó…
Saúl: ¡No es cierto! Ya venías tarde…
Profe: Pásenle ya¬¬
Ambos entraron y el profesor se acercó al escritorio, tomó una lista y una pluma.
Profe: ¿Cómo se llaman?
Los dos: Sebastián Salziso…
Saúl y Sebastián se miraron al darse cuenta que habían hablado al mismo tiempo provocando que sus nombres se mezclaran.
Profe: Uno a la vez, por favor.
Los 2: Saúl Sena…
Volvieron a mirarse pero esta vez con más rabia que antes, el profesor dio un largo suspiro.
Profe: Sebastián Sena y Saúl Salziso ¿verdad?
Los dos: Sí
Profe: Listo. Tomen asiento.
Ambos buscaron dónde sentarse, los pupitres eran dobles y sólo quedaban uno al frente. Sebastián se adelantó y se sentó en él. Saúl hizo un esfuerzo por buscar otro pero no logró encontrarlo, así que se sentó con Sebastián.
Sebastián: ¿Qué pretendes, individuo?
Saúl: Sentarme¬¬
Sebastián: Sí, sí. ¿Pero por qué aquí?
Saúl: No hay más lugares.
Sebastián: Ash, pero osea…
Profe: Silencio, por favor¬¬
Saúl y Sebastián se cruzaron de brazos y voltearon hacia lados contrarios sin mirarse.
Profe: Bueno, como les decía…
La puerta del salón volvió a abrirse y por ella se asomó un hombre con una mochila en la mano, se vía muy agitado.
Jorge: Joven Sebastián… su mochila.
Sebastián: cierto o.o
Sebastián caminó hasta la puerta y tomó su mochila, el profesor, algo enojado, miró su trayecto.
Sebastián: Gracias, Georgie. Nos vemos a la salida^^
Cuando Sebastián volvió a su banco, el profesor dio otro suspiro y continuó hablando.
Profe: Bueno, por enésima vez¬¬ …
Sebastián: ^^
Profe: Les decía que yo seré su profesor de Apreciación a las Artes pero además de eso, soy el director del taller de teatro de la facultad.
Saúl y Sebastián se inclinaron en su banco con los ojos brillantes y mirando fijamente al profesor.
Profe: Mañana van a publicarse unas listas para todos los interesados en inscribirse en el taller, luego de hacerlo tendrán que presentarse a una audición para ver si están calificados para el taller y si son lo suficientemente buenos, podrán tener un papel en la primera obra del semestre que será “El retrato de Dorian Gray”
Sebastián y Saúl: ¡Amo ese libro!
Los dos volvieron a mirarse, esta vez parecía que estaban desafiándose con la mirada.
Sebastián: Espero que no estés pensando lo que creo que estás pensando.
Saúl: Bueno, alguno de los dos tiene que pensar.
Sebastián: Sí, bueno… ehm… ¿qué quisiste decir? O.o
Saúl: No vas a ser Dorian Gray >.<
Sebastián: Ya lo veremos, individuo.
Saúl: ¡Deja de decirme así! D:
Profe: Bueno, muchachos. Sólo me queda darles la bienvenida a la facultad, bienvenidos a mi mundo y bienvenidos a mi vida que espero pronto también sea la de ustedes… ah, y algo más, las actividades del curso se realizarán en parejas y pues para no perder tiempo y conozcan gente nueva, su compañero será con quien están sentados ahora mismo.
Saúl y Sebastián: ¡¿QUÉ?!
Ambos comenzaron a hablar al mismo tiempo sin que alguien entendiera algo de lo que decían.
Profe: ¡Cállense!
Sebastián: …Individuo¬¬… ups^^’
Profe: Si hubieran llegado temprano tendrían otros compañeros pero todo ocurrió de esta forma, así que debe haber una razón para que ustedes estén aquí, juntos. El destino así debe quererlo y me aseguraré de que nadie se haya cambiado, tengo memoria fotográfica. Es todo por hoy, pueden irse.
Todos comenzaron a salir del salón, Saúl subió su mochila al banco para guardar una libreta y entonces Sebastián la tomó y miró aterrado la parte frontal de esta que tenía grabadas en color azul las iniciales “S. S.”
Sebastián: ¡¿Por qué tu mochila dice eso?!
Saúl: Son mis iniciales, Saúl Salziso, “S. S.”
Sebastián alzó su mochila, en la parte de enfrente, con letras anaranjadas ponía: "S. S."
Sebastián: Sebastián Sena, "S. S."¬¬
Saúl: ¡me lleva la…!
Chica: ¡Konnichiwa!^^
Una chica pelirroja estaba detrás de ellos, los miraba con una gran sonrisa en su rostro, era delgada, de la misma estatura que ellos, su roja cabellera era lisa y larga y sus ojos eran cafés.
Los dos: Hola o.o
Chica: Soy Silva Luisana, tú eres Sena-kun y tú, Salziso-kun. ¿Verdad?
Saúl: Sí…
Sebastián: Yo no soy ningún Senakun, me llamo Sebastián.
Luisana: ¿Entonces puedo llamarte Sebastián-kun?^^
Sebastián: Ehmm… ¿eso te hace feliz?
Luisana: Sí, muchísimo.
Sebastián: Bien, whatever…
Saúl: A mí también puedes llamarme por mi nombre de pila.
Luisana: Muchas gracias a los dos, Sebastián-kun y Saúl-kun son tan amables…
Sebastián: Que soy Sebastián¬¬
Saúl: Son sufijos japoneses, tonto¬¬’
Sebastián: Par de frikis ._.
Luisana: Saúl-kun y Sebastián-kun harían linda pareja *o*
Los dos: ¡¿Qué?! O_O
Luisana: Son graciosos juntos y eso es adorable x3
Saúl: ¡Claro que no!
Sebastián: ¿Yo con este individuo? JA! Ya me tengo que ir…
Saúl: ¡Saúl! ¡Me llamo Saúl!
Sebastián siguió caminando sin prestarle atención.
Luisana: Son como los protagonistas de Lawful Drug*o*
Saúl: También me encanta ese manga *o* ¡pero no es así!¬¬
Pasaron otras 2 clases y en ninguna de ellas Sebastián y Saúl volvieron a encontrarse. Luego, Sebastián tuvo una hora libre que aprovechó para ir a la cafetería a almorzar, ahí se encontró con una joven morena, delgada, de cabello rizado que llevaba recogido, tenía muy lindas facciones y era digna de atraer la mirada de cualquiera. Era la misma que estaba en la fotografía del cuarto de Sebastián. Éste la saludó de beso y se sentó con ella.
Sebastián: Creí que nunca te encontraría…
Cinthia: Tuvimos la primera clase juntos pero como llegaste tarde no te pude guardar el lugar y además Ismael también está en ella. Oye y ¿qué onda con el chavo ese que llego contigo?
Sebastián: ¿el Individuo? Pues lo conocí en la entrada cuando se le atravesó a Georgie¬¬ pero… ¿dices que Ismael está en esa misma clase? *o*
Cinthia: Sip, eso es lo genial de que los 3 entráramos a la misma facultad. Es maravilloso.
Sebastián: Oye, me acabo de acordar que… aun no me has dicho quién es el chavo que te gusta.
Cinthia se sonrojó y bajó la mirada.
Cinthia: Ehm… ya lo sabrás. Tal vez hoy o a más tardar mañana, y yo estoy segura que a ti también te gusta alguien y no me lo has dicho.
Sebastián: Bueno, pero es que es un poco más complicado, es que lo que pasa… Cinthia, yo soy…
Cinthia: ¡Ismael!
Un chico alto, delgado, de cabello oscuro y piel aperlada se fue acercando a la mesa. Usaba lentes y su cabello era liso, él era el otro chico de la foto. Sebastián se había quedado embobado mirándolo mientras él se acercaba y saludaba a Cinthia. Le parecía mágica la forma en que su cabello se movía cuando se agachaba, le fascinaba la forma en que se acomodaba sus lentes, le daba ternura su agradable y cálida sonrisa…
Ismael: ¡Qué onda, Seba!^^
Sebastián: Ho-hola, Ismael.
Ismael: Los extrañe tanto en las vacaciones, un día de estos tenemos que salir…
Cinthia: Pero si nos la pasamos saliendo en las vacaciones…
Ismael: ¿Y? Nunca es demasiado si se trata de divertirse con las personas que más quieres.
Ismael miró a Sebastián y le sonrió, éste sintió que su cara y sus oídos se ponían muy calientes.
Ismael: Seba, ¿te sientes bien? o.o estás muy rojo…
Ismael tocó la cara de Sebastián y lo miró fijamente, a Sebastián se le cortaba la respiración.
Ismael: ¡Y tu cara está ardiendo! D:
Sebastián se levantó y caminó hacia la entrada de la cafetería. Cinthia e Ismael lo miraron sorprendidos.
Ismael: ¡Seba, ¿a dónde vas?!
Sebastián: Al baño…
Ismael: Pero el baño está…
Sebastián siguió caminando sin detenerse y salió sin saber a donde se dirigía.
Ismael: …aquí al fondo :/
Sebastián se detuvo fuera de la biblioteca, tocó su cara dónde Sebastián había puesto su mano, su toque había sido muy dulce y suave, podría decirse que hasta con cariño… abrió su mochila y de ella sacó un sobre rosa que contenía una carta dirigida a Ismael.
Sebastián: Ya no puedo más, tengo que decírtelo…
Samuel: ¡Sebastián!^^
Un chico alto, de cuerpo atlético, cabello oscuro, piel aperlada y muy guapo abrazó por la espalda a Sebastián, provocando que éste se asustara y se alejara de él inmediatamente.
Sebastián: ¡¿Qué sientes abrazándome así, Ridículo?! >.<
Samuel: Pues nada o.o sólo que me dio mucho gusto verte y pues quería… tenía ganas de… no quiero que pienses que mis intenciones eran otras o que soy un depravado o… :S
Samuel comenzó a sudar y tartamudear mucho, tanto que Sebastián no entendía nada de lo que decía… ni quería hacerlo.
Samuel: …po-porque, no qui-quise to-to-tocarte donde no-no de-debía, si es que-que-que lo llegué a-a ha-hacer aunque creo que-que no pe-pe-pero…
Sebastián: ¡Stop!
Samuel se quedó callado al instante.
Sebastián: Ya te he dicho que el hecho de que tu primo y yo seamos befos no quiere decir que tú y yo tengamos que fingir que nos llevamos bien…
Samuel: ¿Fingir? pero si yo no…
Sebastián: Nada¬¬ y ya tengo que ir a hacer algo…
Samuel: ¡Espérate, es que te…!
Sebastián volvió a la cafetería a toda velocidad pero no encontró a quien buscaba, salió de ahí y corrió por los pasillos cercanos hasta que lo vio. Ismael estaba parado en medio de la plaza de la facultad, la cual tenía 4 jardineras cuadradas, acomodadas cada una en una esquina, en el centro estaba el emblema de la facultad, que consistía en 2 máscaras rodeadas por un círculo que tenía a su alrededor el nombre de la facultad, una de ellas sonreía y la otra parecía triste. Frente a Ismael estaba Cinthia diciendo algo que a Sebastián no le importó hasta que vio como él sonreía y asentía con su cabeza, tomaba la barbilla de Cinthia acercándola lentamente a sus labios y le daba un beso con el que comenzaba su relación.
La gente caminaba alrededor de ellos sin detenerse, nadie parecía prestarles atención mas que Sebastián, quien metió el sobre rosado a su mochila sin siquiera mirarlo. Sentía como si alguna enorme fuerza proveniente de algún punto en el cielo le hubiese atravesado el cuerpo, quizá era parecido a lo que se sentía al ser víctima de la caía de un rayo. Mientras que su alma se había convertido en miles de trozos de un espejo roto y ahora sus pies eran los únicos soportando ese peso que antes no se sentía. Se dio la vuelta y vio a Samuel acercándose.
Samuel: Te alcancé^^ pff, no por nada dicen que soy un excelente deportista… mira, ¿recuerdas cuando los vimos? es que noté que tus audífonos…
Samuel seguía hablando y los oídos de Sebastián se estaban cansando…
Samuel: Y te los compré^^
Samuel le dio unos audífonos anaranjados con detalles blancos a Sebastián, éste los miró sin darse cuenta de lo que hacía, entonces los apretó fuertemente con su mano y miró a Samuel con una gran desesperación.
Samuel: Ahora quisiera decirte algo muy importante…
Sebastián: ¡Aléjate de mí, IMBÉCIL!
Sebastián le lanzó el regalo en la cara y se fue corriendo. Los audífonos cayeron al suelo y Samuel se apresuró a levantarlos.
Samuel: ...Te amo u.u’
Última edición por Machucarules el Sáb 24 Abr - 21:44, editado 2 veces
Re: Playlist (Cap. 1)
tu eres sebastian
el retrato de dorian gray su pintura envejeze por el a la edad de 20 año kate me lo dijo ahorita xD
esta segunda parte de la bascula me gusto jajaja
ahora ta mas shido un chingo de enredos amorosos
jajaja no me gusto el nombre de uno pero bueno ¬¬ jajaja x's
el retrato de dorian gray su pintura envejeze por el a la edad de 20 año kate me lo dijo ahorita xD
esta segunda parte de la bascula me gusto jajaja
ahora ta mas shido un chingo de enredos amorosos
jajaja no me gusto el nombre de uno pero bueno ¬¬ jajaja x's
pako_tigres- Jounin
- Cantidad de envíos : 128
Edad : 32
Localización : en mi kasa
Fecha de inscripción : 11/09/2008
Re: Playlist (Cap. 1)
según yo no la habías subido xP
D: yo también espero tus historias niichan haha me gusta leerlas [inner: y criticarlas =P]
simon ya la leí haha pss sí me gustó aunque halla ido muy rápido haha pero ya sé que mierda mierda y así
hahaha
bueno ni modo xD
ánimo machuca, tienes razón al final eso es lo único importante
bueno ya me largo0 sho sí te firmo juuum
haha
sayo0naraaaaaaaaaaaaaaaaaaaa
PD: ya sé está va en el flog pero esta fuera de mierda XD
D: yo también espero tus historias niichan haha me gusta leerlas [inner: y criticarlas =P]
simon ya la leí haha pss sí me gustó aunque halla ido muy rápido haha pero ya sé que mierda mierda y así
hahaha
bueno ni modo xD
ánimo machuca, tienes razón al final eso es lo único importante
bueno ya me largo0 sho sí te firmo juuum
haha
sayo0naraaaaaaaaaaaaaaaaaaaa
PD: ya sé está va en el flog pero esta fuera de mierda XD
Página 1 de 1.
Permisos de este foro:
No puedes responder a temas en este foro.