El Problema del Mal Ep.1 Cap. #7
3 participantes
Página 1 de 1.
El Problema del Mal Ep.1 Cap. #7
Pilar y Paco parecían no darse cuenta de qué era lo que ocurría; el cuerpo de Arturo seguía inmóvil en el piso, con la manta cubriéndolo.
Pilar: ¿Quién es?
Carla lo sabía, aunque no tenía una idea concreta sobre esa persona y las vendas que le cubrían el rostro no la dejaban recordar su cara, algo dentro de ella lo sabía bien y quería salir, reencontrarse con aquel ser y terminar con lo que había comenzado, pero Carla sentía un gran temor en aceptar ese sentimiento y expulsarlo.
Beto: Es Pereza
Paco: ¡¿No estaba muerta?!
Nora: Podríamos decir que lo estuve, muchachos….
Nora puso sus manos en su nuca y comenzó a desenredarse los vendajes.
Nora: Y ahora he resucitado con ansias de…
Las vendas cayeron al suelo y Pilar lanzó un grito, dio un paso atrás y se cubrió la boca cuando vio el rostro cicatrizado y sin cabello de Nora.
Nora: …devolverte el favor
Una llamarada salió de la boca de Nora y se dirigió a la cara de Carla quien se protegió con sus manos, las cuales absorbieron el fuego.
Nora: ¡Tus nuevos trucos no van a funcionarte!
Carla vio el puño de Nora acercándose y sintió un fuerte golpe en su nariz antes de caer de espaldas y golpearse en la cabeza con el respaldo de una silla.
Capítulo #7: Otra Realidad
Alex: ¿Estás bien?
Carla abrió sus ojos un poco y frente a ella vio la borrosa figura de su esposo muerto.
Alex: Amor, ¿estás bien?
Carla: ¡¿Alejandro?!
Carla se sentó, estaba en su recámara, llevaba puesta una bata y Alex tenía un pijama.
Carlas: Es-estás…
Alex: Tranquila, fue un sueño
Carla: ¿Un sueño?
Alex: Sí, y uno feo, te caíste de la cama
Carla: Todo fue… un sueño.
Carla dio un fuerte suspiro y entonces se puso de pie muy alterada y corrió hacia la puerta.
Alex: ¿A dónde vas?
Carla: A ver a las niñas…
Carla entró a la habitación de sus hijas y las encontró acostadas en sus camas, durmiendo profundamente. Ella se acercó a Hilda y la abrazó muy fuerte.
Hilda: Mamá… Mamá ¡¿qué te pasa?! Déjame dormir…
Flor se despertó y subió a la cama de su hermana para unirse al abrazo.
Carla: Las amo, niñas.
Hilda: Yo también… y te amaría más si me dejaras dormir.
Flor: A mi abrázame todo lo que quieras, mami.
Carla se quedó un rato así, besó a sus hijas, las arropó y volvió con su esposo.
Alex: ¿Qué pasa?
Carla: Nada, sí que los extrañaba…
Carla abrazó a su marido y él correspondió a su abrazo, entonces ella vio una figura espeluznante parada en medio del pasillo, tenía un par de alas sin plumas, su cuerpo era color gris, delgado, con cuernos encorvados hacia atrás, ojos de color rojo, con grandes colmillos y con una sonrisa enfermiza.
Carla: ¡DIOS MÍO!
Carla se hizo para atrás y Alex miró en la misma dirección que ella pero ya no había nada ahí.
Alex: ¿Ahora qué?
Carla: Na-nada
Alex: ¿Cómo que nada? Estás muy rara… ¿te presionaste demasiado para la fiesta?
Carla: ¿Fiesta?
Alex: Sí, la fiesta de Hilda, es hoy.
Carla levantó un poco las cejas.
Carla: Cierto, ehm, sí, es que se me olvidó comprar los vasos.
Alex: Yo los compré ayer, no te preocupes.
Carla: Gracias, amor, volvamos a dormir.
Ambos volvieron a la cama pero sólo uno durmió, Carla tenía tanto miedo de cerrar los ojos y abrirlos de nuevo para darse cuenta de que su esposo estaba muerto; sus hijas, secuestradas y ella en un viaje de 10 días como límite para recuperarlas. Se quedó pensando en que quizá todo aquello podría ser un truco de Envidia, quien ya había usado sus poderes antes, pero había algo distinto esta vez, todo era tan real y no sentía que alguien estuviese en su mente tratando de hacerla cometer alguna locura.
Amaneció, Carla ya estaba aseando la casa y preparando todo para la fiesta y le dio nostalgia ver de nuevo los accesorios de su casa, la fotografía de su familia, la biblia que estaba abierta en el Génesis, la puerta de su casa que se encontraba bien puesta en su lugar y bien cerrada, y esa otra puerta… la del sótano. Al verla, Carla recordó algo que había pasado por alto desde el principio; sus hijas la habían empujado por ahí antes de ser secuestradas. Su mente comenzó a llenarse de dudas a las cuales no tenía idea de cómo comenzar a darles una respuesta. Miró entonces la biblia y recordó que se había levantado de madrugada, las luces de su casa habían comenzado a fallar y ella había sentido la presencia de alguien más, quien se esfumó cuando ella leyó un versículo de la biblia, pero de pronto se dio cuenta que si todo aquello había sido un sueño, no tenía caso seguir pensando en ello. Carla tomó una llave y cerró la puerta del sótano con ella, luego la escondió… por si las dudas.
Para cuando Pilar llegó a la casa, Carla ya estaba arreglada y todo estaba listo para la fiesta.
Pilar: Hola, anciana.
Carla: No traes globos…
Pilar: Ehm, no O.o debería?
Carla: No, claro que no^^
Pilar: ¿Quieres que te ayude en algo?
Carla: No, todo está perfecto, sólo falta que llegue Alex del trabajo.
Pilar: ¿Aletz? ¿Quién es…? Ah sí, mi hermano, tu esposo, el wey ese…
Flor bajó corriendo las escaleras y fue a darle un abrazo a Pilar.
Flor: ¡Tía! ¿Y esos regalos?
Pilar: Son para tu hermana, ella es la cumpleañera y por cierto ¿dónde está mi sobrina favorita?
Flor: Y yo no soy tu sobrina favorita? D:
Pilar: Tú eres mi porquería favorita
Flor: Bueno… oye! D:
Pilar se rió e Hilda bajó a saludarla, recibió sus regalos y Alex llegó.
Alex: ¿Todavía no llega nadie?
Pilar: Y yo qué? ¿Estoy pintada?
Alex: Tienes cara de enferma, así que creo que no te pintaste
Pilar: Sí me maquillé!
Alex: Entonces así tienes la cara…
Pilar, Alex y las niñas fueron a sentarse a la sala mientras que Carla miraba por la venta, asegurándose que no llegara nadie extraño.
Minutos después, la casa estaba llena de invitados y la fiesta iba pasando con normalidad, pero Carla no podía quitar los ojos de encima a la biblia, la cual se encontraba abierta en la misma página donde la había dejado aquella noche. ¿Por qué estaba abierta ahí si eso había sido un sueño?
Pilar: ¿Carla? ¿Estás bien?
Carla: Sí, sí, ¿alguien quiere más pastel?
Carla se paró para servir más pastel y cuando se dio la vuelta vio el espejo estrellado que colgaba del muro y nadie parecía notarlo.
Carla: ¿Qué le pasó al espejo? No estaba así.
Pilar: Tú le arrojaste la biblia, ¿ya lo olvidaste?
Pilar siguió comiendo pastel y los demás seguían disfrutando de la fiesta. La biblia estaba en el suelo y de sus páginas salía sangre.
Carla: ¿Qué es…?
Beto: Por Dios…
Beto y Paco estaba frente a ella, parados justo como la primera vez que los vio.
Paco: Encontrar a tus hijas.
Beto: Diez días…
«Serán diez días de prueba»
Carla comenzó a escuchar voces provenientes de todas partes, se trataba de susurros simultáneos que entonaban frases como: “Divinos”, “Reinos”, “nombres de flores”, “tus hijas…”, “demonios”, “pecados capitales”, “Belzebú”, “virtud”…
Carla se cubrió los oídos, la puerta de su casa salió volando, Alma colgaba del techo, Alex se convirtió en un montón de cenizas y los niños se derretían hasta sólo ser pequeños pies sueltos. En medio de Paco y Beto apareció el ser de antes, con su horrenda sonrisa, abriendo la boca, dejando ver sus grandes colmillos y acercándose a Carla… todo se oscureció por un momento, Carla tenía presente en su mente la frase que había leído en la biblia: “Dijo Dios: «Haya luz», y hubo luz. Dios vio que la luz era buena, y separó la luz de las tinieblas.” Y entonces frente a ella, en medio de aquella interminable y profunda oscuridad, una mano apareció, ella la tomó sin dudarlo y en ese instante la luz volvió, como si alguien hubiese encendido un gran foco encima de ellos. Ahora estaba en un lugar totalmente en blanco.
Arturo: El hijo de Belzebú estaba entrando en tu sueño y me permitieron intervenir, perdón por meterme aquí sin permiso.
Carla: ¿Sueño? Entonces he estado dormida?
Arturo: Todavía lo estás.
Carla: Entonces todo lo que vi fue…
Arturo: Estamos dentro de tu sueño. Cuando dormimos y soñamos, entramos en un espacio diferente, un lugar al cual sólo las almas pueden entrar, “porque un sueño por si mismo también es un mundo”
Carla vio aparecer a una persona igual a ella, pero ésta tenía ojos rojos, colmillos y un gran par de alas negras.
Carla: Esta persona es…
Arturo: Es el otro ser que vive dentro de ti, sin embargo es diferente de ti, es un ser oscuro… un demonio.
Carla: ¿Por qué tengo un demonio dentro de mí?
Arturo: En este caso no se trata de ninguna posesión demoníaca, esta persona está dentro de ti porque tú y ella… son un sola. Ella es tu otra mitad y debes aprender a equilibrarte con ella.
Carla: ¿Cómo que equilibrarme?
Arturo: Cuando tus poderes fueron liberados, también esta parte de ti lo fue y para aprovechar tus poderes al máximo, debes aprender a equilibrar ambas partes, tener un control con tus dos mitades y no dejar que esta te domine por completo.
Carla: Pero los demás… ¿ellos no tienen esto o sí?
Arturo: No…
Carla: ¿Por qué yo sí?
Arturo: No me dieron permiso de decirte eso, pero en el Reino del Cerezo obtendrás las respuestas que buscas.
Carla: El Reino del Cerezo…
Flor: ¿Mami?
Carla miró a su derecha y vio a sus dos hijas tomando ambas manos de su padre.
Arturo: Aprovecha ahora, no siempre se logra entrar en los sueños de alguien… y menos tantos a la vez.
Carla: Entonces ellas son…
Ambas niñas corrieron a abrazarla.
Hilda: No te preocupes, estamos bien.
Flor: Nos tienen llenas de cables y cosas raras pero nos dan de comer y además… él nos dijo que nos encontrarías.
Carla: ¿Quién?
Flor apuntó detrás de ella y junto a Alex estaba parado un joven moreno de bata azul que andaba descalzo.
Carla: Tú eres el que vi antes… en el otro sueño.
Machuca: Tenemos que irnos ya
Carla: ¿Por qué?
Flor: Porque se cansa… él está muy débil y se cansa mucho cuando entra a un sueño y hoy nos ha traído a las dos.
Hilda: Vámonos Flor, adiós, Mamá.
Las niñas le dieron un último abrazo, abrazaron también a su padre y tomaron las manos de Machuca.
Carla: Cuídalas… hasta que las encuentre.
Machuca: Sí.
Las tres figuras desaparecieron y Alex se acercó a Carla.
Alex: Perdóname por dejarte sola…
Carla comenzó a llorar y lo abrazó, tocó su rostro, revisándolo suavemente y luego lo besó como lo hacía cuando eran adolescentes.
Carla: Te amo.
Alex: Cuídate mucho, mi amor y… ¡No te rindas!
Carla y Alex se tomaron de las manos y entrecruzaron sus dedos, las levantaron a la altura de sus caras y se dieron un último beso mientras Alex se desvanecía.
Arturo: Los muertos tenemos tiempo limitado aquí… y creo que ya es hora de que yo me vaya también, pero antes… recuerda sacar a ese demonio de mi reino y si logran recuperar el poder, vuelvan a la mansión y vayan al segundo piso, hay un baúl viejo, ábranlo…
Arturo había desaparecido y Carla se encontraba sola con su otra yo, en aquel espacio vacío.
Carla: Hora de despertar…
Carla cerró sus ojos y antes de que pudiera volver a abrirlo, sintió un fuerte dolor en su nariz y algo le escurría por sus fosas nasales. Sus ojos se abrieron, Beto y Paco golpeaban a Nora y Pilar se acercaba a ella.
Pilar: ¿Estás bien?
Carla: Sí, sí!
Pilar: ok o.o
Carla se levantó, se quitó la sangre de la nariz y vio a Paco y a Beto ser arrojados uno a cada lado de ella. Sus ojos volvieron a cerrarse mientras Nora avanzaba lentamente hacia ella, Carla vio a su otra yo quien también la miraba fijamente.
Carla: Tienes que ayudarme.
Carla2: ¿Por qué?
Carla: …Porque de verdad anhelo salvar a mis… a nuestras hijas y yo te necesito… y tú también me necesitas.
Carla extendió su mano hacia su doble y ella la tomó. Bajo sus pies apareció el triángulo sagrado y de su espalda salieron dos alas, la negra y la blanca de siempre. Sus ojos se abrieron y Nora se detuvo.
Carla: Dijiste que…
Carla levantó su brazo derecho y todo a su alrededor se puso color celeste, luego todo ese color fue uniéndose en una pequeña esfera traslúcida que flotaba en su palma.
Carla: …venías por mí.
Carla apuntó a Nora con su mano, donde aun flotaba la esfera celeste.
Carla: ¡Entonces inténtalo!
Nora sonrió malévolamente y la esfera se impulsó hacia ella en forma de espiral…
Pilar: ¿Quién es?
Carla lo sabía, aunque no tenía una idea concreta sobre esa persona y las vendas que le cubrían el rostro no la dejaban recordar su cara, algo dentro de ella lo sabía bien y quería salir, reencontrarse con aquel ser y terminar con lo que había comenzado, pero Carla sentía un gran temor en aceptar ese sentimiento y expulsarlo.
Beto: Es Pereza
Paco: ¡¿No estaba muerta?!
Nora: Podríamos decir que lo estuve, muchachos….
Nora puso sus manos en su nuca y comenzó a desenredarse los vendajes.
Nora: Y ahora he resucitado con ansias de…
Las vendas cayeron al suelo y Pilar lanzó un grito, dio un paso atrás y se cubrió la boca cuando vio el rostro cicatrizado y sin cabello de Nora.
Nora: …devolverte el favor
Una llamarada salió de la boca de Nora y se dirigió a la cara de Carla quien se protegió con sus manos, las cuales absorbieron el fuego.
Nora: ¡Tus nuevos trucos no van a funcionarte!
Carla vio el puño de Nora acercándose y sintió un fuerte golpe en su nariz antes de caer de espaldas y golpearse en la cabeza con el respaldo de una silla.
Capítulo #7: Otra Realidad
Alex: ¿Estás bien?
Carla abrió sus ojos un poco y frente a ella vio la borrosa figura de su esposo muerto.
Alex: Amor, ¿estás bien?
Carla: ¡¿Alejandro?!
Carla se sentó, estaba en su recámara, llevaba puesta una bata y Alex tenía un pijama.
Carlas: Es-estás…
Alex: Tranquila, fue un sueño
Carla: ¿Un sueño?
Alex: Sí, y uno feo, te caíste de la cama
Carla: Todo fue… un sueño.
Carla dio un fuerte suspiro y entonces se puso de pie muy alterada y corrió hacia la puerta.
Alex: ¿A dónde vas?
Carla: A ver a las niñas…
Carla entró a la habitación de sus hijas y las encontró acostadas en sus camas, durmiendo profundamente. Ella se acercó a Hilda y la abrazó muy fuerte.
Hilda: Mamá… Mamá ¡¿qué te pasa?! Déjame dormir…
Flor se despertó y subió a la cama de su hermana para unirse al abrazo.
Carla: Las amo, niñas.
Hilda: Yo también… y te amaría más si me dejaras dormir.
Flor: A mi abrázame todo lo que quieras, mami.
Carla se quedó un rato así, besó a sus hijas, las arropó y volvió con su esposo.
Alex: ¿Qué pasa?
Carla: Nada, sí que los extrañaba…
Carla abrazó a su marido y él correspondió a su abrazo, entonces ella vio una figura espeluznante parada en medio del pasillo, tenía un par de alas sin plumas, su cuerpo era color gris, delgado, con cuernos encorvados hacia atrás, ojos de color rojo, con grandes colmillos y con una sonrisa enfermiza.
Carla: ¡DIOS MÍO!
Carla se hizo para atrás y Alex miró en la misma dirección que ella pero ya no había nada ahí.
Alex: ¿Ahora qué?
Carla: Na-nada
Alex: ¿Cómo que nada? Estás muy rara… ¿te presionaste demasiado para la fiesta?
Carla: ¿Fiesta?
Alex: Sí, la fiesta de Hilda, es hoy.
Carla levantó un poco las cejas.
Carla: Cierto, ehm, sí, es que se me olvidó comprar los vasos.
Alex: Yo los compré ayer, no te preocupes.
Carla: Gracias, amor, volvamos a dormir.
Ambos volvieron a la cama pero sólo uno durmió, Carla tenía tanto miedo de cerrar los ojos y abrirlos de nuevo para darse cuenta de que su esposo estaba muerto; sus hijas, secuestradas y ella en un viaje de 10 días como límite para recuperarlas. Se quedó pensando en que quizá todo aquello podría ser un truco de Envidia, quien ya había usado sus poderes antes, pero había algo distinto esta vez, todo era tan real y no sentía que alguien estuviese en su mente tratando de hacerla cometer alguna locura.
Amaneció, Carla ya estaba aseando la casa y preparando todo para la fiesta y le dio nostalgia ver de nuevo los accesorios de su casa, la fotografía de su familia, la biblia que estaba abierta en el Génesis, la puerta de su casa que se encontraba bien puesta en su lugar y bien cerrada, y esa otra puerta… la del sótano. Al verla, Carla recordó algo que había pasado por alto desde el principio; sus hijas la habían empujado por ahí antes de ser secuestradas. Su mente comenzó a llenarse de dudas a las cuales no tenía idea de cómo comenzar a darles una respuesta. Miró entonces la biblia y recordó que se había levantado de madrugada, las luces de su casa habían comenzado a fallar y ella había sentido la presencia de alguien más, quien se esfumó cuando ella leyó un versículo de la biblia, pero de pronto se dio cuenta que si todo aquello había sido un sueño, no tenía caso seguir pensando en ello. Carla tomó una llave y cerró la puerta del sótano con ella, luego la escondió… por si las dudas.
Para cuando Pilar llegó a la casa, Carla ya estaba arreglada y todo estaba listo para la fiesta.
Pilar: Hola, anciana.
Carla: No traes globos…
Pilar: Ehm, no O.o debería?
Carla: No, claro que no^^
Pilar: ¿Quieres que te ayude en algo?
Carla: No, todo está perfecto, sólo falta que llegue Alex del trabajo.
Pilar: ¿Aletz? ¿Quién es…? Ah sí, mi hermano, tu esposo, el wey ese…
Flor bajó corriendo las escaleras y fue a darle un abrazo a Pilar.
Flor: ¡Tía! ¿Y esos regalos?
Pilar: Son para tu hermana, ella es la cumpleañera y por cierto ¿dónde está mi sobrina favorita?
Flor: Y yo no soy tu sobrina favorita? D:
Pilar: Tú eres mi porquería favorita
Flor: Bueno… oye! D:
Pilar se rió e Hilda bajó a saludarla, recibió sus regalos y Alex llegó.
Alex: ¿Todavía no llega nadie?
Pilar: Y yo qué? ¿Estoy pintada?
Alex: Tienes cara de enferma, así que creo que no te pintaste
Pilar: Sí me maquillé!
Alex: Entonces así tienes la cara…
Pilar, Alex y las niñas fueron a sentarse a la sala mientras que Carla miraba por la venta, asegurándose que no llegara nadie extraño.
Minutos después, la casa estaba llena de invitados y la fiesta iba pasando con normalidad, pero Carla no podía quitar los ojos de encima a la biblia, la cual se encontraba abierta en la misma página donde la había dejado aquella noche. ¿Por qué estaba abierta ahí si eso había sido un sueño?
Pilar: ¿Carla? ¿Estás bien?
Carla: Sí, sí, ¿alguien quiere más pastel?
Carla se paró para servir más pastel y cuando se dio la vuelta vio el espejo estrellado que colgaba del muro y nadie parecía notarlo.
Carla: ¿Qué le pasó al espejo? No estaba así.
Pilar: Tú le arrojaste la biblia, ¿ya lo olvidaste?
Pilar siguió comiendo pastel y los demás seguían disfrutando de la fiesta. La biblia estaba en el suelo y de sus páginas salía sangre.
Carla: ¿Qué es…?
Beto: Por Dios…
Beto y Paco estaba frente a ella, parados justo como la primera vez que los vio.
Paco: Encontrar a tus hijas.
Beto: Diez días…
«Serán diez días de prueba»
Carla comenzó a escuchar voces provenientes de todas partes, se trataba de susurros simultáneos que entonaban frases como: “Divinos”, “Reinos”, “nombres de flores”, “tus hijas…”, “demonios”, “pecados capitales”, “Belzebú”, “virtud”…
Carla se cubrió los oídos, la puerta de su casa salió volando, Alma colgaba del techo, Alex se convirtió en un montón de cenizas y los niños se derretían hasta sólo ser pequeños pies sueltos. En medio de Paco y Beto apareció el ser de antes, con su horrenda sonrisa, abriendo la boca, dejando ver sus grandes colmillos y acercándose a Carla… todo se oscureció por un momento, Carla tenía presente en su mente la frase que había leído en la biblia: “Dijo Dios: «Haya luz», y hubo luz. Dios vio que la luz era buena, y separó la luz de las tinieblas.” Y entonces frente a ella, en medio de aquella interminable y profunda oscuridad, una mano apareció, ella la tomó sin dudarlo y en ese instante la luz volvió, como si alguien hubiese encendido un gran foco encima de ellos. Ahora estaba en un lugar totalmente en blanco.
Arturo: El hijo de Belzebú estaba entrando en tu sueño y me permitieron intervenir, perdón por meterme aquí sin permiso.
Carla: ¿Sueño? Entonces he estado dormida?
Arturo: Todavía lo estás.
Carla: Entonces todo lo que vi fue…
Arturo: Estamos dentro de tu sueño. Cuando dormimos y soñamos, entramos en un espacio diferente, un lugar al cual sólo las almas pueden entrar, “porque un sueño por si mismo también es un mundo”
Carla vio aparecer a una persona igual a ella, pero ésta tenía ojos rojos, colmillos y un gran par de alas negras.
Carla: Esta persona es…
Arturo: Es el otro ser que vive dentro de ti, sin embargo es diferente de ti, es un ser oscuro… un demonio.
Carla: ¿Por qué tengo un demonio dentro de mí?
Arturo: En este caso no se trata de ninguna posesión demoníaca, esta persona está dentro de ti porque tú y ella… son un sola. Ella es tu otra mitad y debes aprender a equilibrarte con ella.
Carla: ¿Cómo que equilibrarme?
Arturo: Cuando tus poderes fueron liberados, también esta parte de ti lo fue y para aprovechar tus poderes al máximo, debes aprender a equilibrar ambas partes, tener un control con tus dos mitades y no dejar que esta te domine por completo.
Carla: Pero los demás… ¿ellos no tienen esto o sí?
Arturo: No…
Carla: ¿Por qué yo sí?
Arturo: No me dieron permiso de decirte eso, pero en el Reino del Cerezo obtendrás las respuestas que buscas.
Carla: El Reino del Cerezo…
Flor: ¿Mami?
Carla miró a su derecha y vio a sus dos hijas tomando ambas manos de su padre.
Arturo: Aprovecha ahora, no siempre se logra entrar en los sueños de alguien… y menos tantos a la vez.
Carla: Entonces ellas son…
Ambas niñas corrieron a abrazarla.
Hilda: No te preocupes, estamos bien.
Flor: Nos tienen llenas de cables y cosas raras pero nos dan de comer y además… él nos dijo que nos encontrarías.
Carla: ¿Quién?
Flor apuntó detrás de ella y junto a Alex estaba parado un joven moreno de bata azul que andaba descalzo.
Carla: Tú eres el que vi antes… en el otro sueño.
Machuca: Tenemos que irnos ya
Carla: ¿Por qué?
Flor: Porque se cansa… él está muy débil y se cansa mucho cuando entra a un sueño y hoy nos ha traído a las dos.
Hilda: Vámonos Flor, adiós, Mamá.
Las niñas le dieron un último abrazo, abrazaron también a su padre y tomaron las manos de Machuca.
Carla: Cuídalas… hasta que las encuentre.
Machuca: Sí.
Las tres figuras desaparecieron y Alex se acercó a Carla.
Alex: Perdóname por dejarte sola…
Carla comenzó a llorar y lo abrazó, tocó su rostro, revisándolo suavemente y luego lo besó como lo hacía cuando eran adolescentes.
Carla: Te amo.
Alex: Cuídate mucho, mi amor y… ¡No te rindas!
Carla y Alex se tomaron de las manos y entrecruzaron sus dedos, las levantaron a la altura de sus caras y se dieron un último beso mientras Alex se desvanecía.
Arturo: Los muertos tenemos tiempo limitado aquí… y creo que ya es hora de que yo me vaya también, pero antes… recuerda sacar a ese demonio de mi reino y si logran recuperar el poder, vuelvan a la mansión y vayan al segundo piso, hay un baúl viejo, ábranlo…
Arturo había desaparecido y Carla se encontraba sola con su otra yo, en aquel espacio vacío.
Carla: Hora de despertar…
Carla cerró sus ojos y antes de que pudiera volver a abrirlo, sintió un fuerte dolor en su nariz y algo le escurría por sus fosas nasales. Sus ojos se abrieron, Beto y Paco golpeaban a Nora y Pilar se acercaba a ella.
Pilar: ¿Estás bien?
Carla: Sí, sí!
Pilar: ok o.o
Carla se levantó, se quitó la sangre de la nariz y vio a Paco y a Beto ser arrojados uno a cada lado de ella. Sus ojos volvieron a cerrarse mientras Nora avanzaba lentamente hacia ella, Carla vio a su otra yo quien también la miraba fijamente.
Carla: Tienes que ayudarme.
Carla2: ¿Por qué?
Carla: …Porque de verdad anhelo salvar a mis… a nuestras hijas y yo te necesito… y tú también me necesitas.
Carla extendió su mano hacia su doble y ella la tomó. Bajo sus pies apareció el triángulo sagrado y de su espalda salieron dos alas, la negra y la blanca de siempre. Sus ojos se abrieron y Nora se detuvo.
Carla: Dijiste que…
Carla levantó su brazo derecho y todo a su alrededor se puso color celeste, luego todo ese color fue uniéndose en una pequeña esfera traslúcida que flotaba en su palma.
Carla: …venías por mí.
Carla apuntó a Nora con su mano, donde aun flotaba la esfera celeste.
Carla: ¡Entonces inténtalo!
Nora sonrió malévolamente y la esfera se impulsó hacia ella en forma de espiral…
Última edición por Machucarules el Dom 3 Ene - 19:15, editado 2 veces
Re: El Problema del Mal Ep.1 Cap. #7
linda historia
pasa por mi flog ^^
regreso post xD
pasa por mi flog ^^
regreso post xD
pako_tigres- Jounin
- Cantidad de envíos : 128
Edad : 32
Localización : en mi kasa
Fecha de inscripción : 11/09/2008
Re: El Problema del Mal Ep.1 Cap. #7
bno posteo de nuevo no mas por que machuca dijo que comentario serio
en vez de poner ¿sueño?
*pusiste ¿sueno?
y no creo que un ser tan malvado como se dice carla2 se dejaria controlar tan facil. no se como que deberia tomar tiempo ya que carla es novata para usar sus poderes aunque tu eres el escritor
en vez de poner ¿sueño?
*pusiste ¿sueno?
y no creo que un ser tan malvado como se dice carla2 se dejaria controlar tan facil. no se como que deberia tomar tiempo ya que carla es novata para usar sus poderes aunque tu eres el escritor
pako_tigres- Jounin
- Cantidad de envíos : 128
Edad : 32
Localización : en mi kasa
Fecha de inscripción : 11/09/2008
Re: El Problema del Mal Ep.1 Cap. #7
ahh y ya cambia la madre que sale arrib ya se acabo happy magic
aunque espero con ansias el especial de navidad
aunque espero con ansias el especial de navidad
pako_tigres- Jounin
- Cantidad de envíos : 128
Edad : 32
Localización : en mi kasa
Fecha de inscripción : 11/09/2008
Re: El Problema del Mal Ep.1 Cap. #7
no va a haber especial de navidad!!! xD ya me cansé de repetirtelo
Re: El Problema del Mal Ep.1 Cap. #7
eres malo
pss yo voy a hacer un especial de navidad no te voy a decir de que se trata pero lo hare
despues me quitas las ideas como en happy magic el que haces especial de halloween ¬¬
pss yo voy a hacer un especial de navidad no te voy a decir de que se trata pero lo hare
despues me quitas las ideas como en happy magic el que haces especial de halloween ¬¬
pako_tigres- Jounin
- Cantidad de envíos : 128
Edad : 32
Localización : en mi kasa
Fecha de inscripción : 11/09/2008
Re: El Problema del Mal Ep.1 Cap. #7
xD jajajaja yo no te quité ninguna idea, tú me dijiste que me dirías tus ideas para que yo las usara para el capítulo especial xD
Re: El Problema del Mal Ep.1 Cap. #7
:'( ire a derechos de autor yo no firme nada
pako_tigres- Jounin
- Cantidad de envíos : 128
Edad : 32
Localización : en mi kasa
Fecha de inscripción : 11/09/2008
Re: El Problema del Mal Ep.1 Cap. #7
ohhhh porfin los leis todos
me tarde komo dos oras en leerlos todos
pero te dije machuka ke los leiria todos i k
me pondria al koriente kon tus historias
k por cierto me enkanto las seguire leyendo
me tarde komo dos oras en leerlos todos
pero te dije machuka ke los leiria todos i k
me pondria al koriente kon tus historias
k por cierto me enkanto las seguire leyendo
kate_esunpato- Genin
- Cantidad de envíos : 40
Fecha de inscripción : 24/02/2008
Temas similares
» El problema del Mal Ep. 1 Cap. #2
» El problema del Mal Ep. 1 Cap. #3
» El problema del Mal Ep.1 Cap. #4
» El problema del Mal Ep.1 Cap. #5
» El problema del Mal Ep.1 Cap. #6
» El problema del Mal Ep. 1 Cap. #3
» El problema del Mal Ep.1 Cap. #4
» El problema del Mal Ep.1 Cap. #5
» El problema del Mal Ep.1 Cap. #6
Página 1 de 1.
Permisos de este foro:
No puedes responder a temas en este foro.